Bankinter deberá restituir a los demandantes las sumas indebidamente abonadas a consecuencia de la cláusula de gastos más los intereses legales.
Todos aquellos que ya hayan iniciado la reclamación de gastos hipotecarios por su cuenta se habrán encontrado –casi con total probabilidad– con la misma respuesta por parte del banco: “la cláusula formaba parte del precio y fue negociada“.
Como no es verdad (se trata de una cláusula impuesta) y, además, es la entidad quien debe probarlo en sede judicial, hay que recurrir al Juez imparcial para obtener un poco de Justicia.
Éste ha sido el caso de nuestros patrocinados en su reclamación por gastos hipotecarios contra Bankinter.
Si lo que el empresario predisponente ofrece es un paquete de condiciones que el adherente sólo puede aceptar o rechazar en su conjunto, pero no puede influir en el contenido o supresión de una cláusula concreta, aisladamente considerada del resto, no podemos hablar de negociación.
Y corresponde al empresario predisponente acreditar que esto ha sido así, es decir, que el prestatario tuvo posibilidad de negociar de forma efectiva.
“Esto no se ha acreditado con la prueba documental aportada, y ello, porque nuevamente debe incidirse en que no se acredita que esta cláusula fuera objeto de negociación individual, tal y como exige la jurisprudencia del Tribunal Supremo“.
Fallo
1º.- Declaración de nulidad –por abusiva– de la cláusula QUINTA del préstamo hipotecario objeto del procedimiento.
2º.- Condena a BANKINTER S.A. a eliminar dicha cláusula y a restituir a los actores las sumas indebidamente abonadas a consecuencia de la misma.
3º.- Condena a BANKINTER S.A. al pago a los actores de los intereses legales de esta cantidad desde la fecha del pago del prestatario de dichos gastos, incrementada en dos puntos porcentuales desde la fecha de la sentencia.
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